Un calendario editorial no es más que plasmar en papel las ideas que tienes para publicar el próximo mes. Parece sencillo pero muy pocos lo hacen y en sus pobres resultados en redes sociales se ven las consecuencias.
Programarlo todo con anticipación te va a dar mucha tranquilidad, porque no vas a ir a salto de mata sin saber de qué hablar en tus redes sociales y ofreciendo contenido de mala calidad.
Otro de los beneficios que tiene, es que podrás evitar la tendencia que todos tenemos de hablar de nuestros productos y servicios constantemente. Como ya hemos visto, en redes sociales tenemos que aportar distintos contenidos y solo el 20 % debe ser enfocado a la venta. Sin embargo tenemos tendencia a la venta de forma natural e innata y solo con una buena programación previa podemos luchar contra esa tendencia.
De esa manera podrás crear un calendario editorial que mantenga un equilibrio entre los distintos tipos de contenidos:
- Días especiales como el día de la Madre, el día Libre de las Bolsas de Plástico, el día de la Prevención contra el Cáncer o cualquier tu otra efeméride que tenga relación con tu negocio. Ten cuidado y no peques de un exceso de celebraciones. Procura que realmente tengan que ver con tu negocio o marca.
- Frases de inspiración y motivación que conecten con necesidades, deseos o problemáticas de nuestros seguidores. Que toquen sus puntos de dolor y despierten sus emociones logrando que interactúen con esa publicación.
- Contenido creado directamente por los fans a través de testimonios que nos dejen en mensajes directos comentarios o asesorías que les ofrezcamos. Este tipo de contenido nos ayuda a fidelizar y es perfecto para compartirlo en los stories. También debemos aprovechar cuando publican en sus redes sociales fotografías de nuestros productos y nos etiquetan.
- Opiniones de influencers sobre nuestros productos o servicios, a través de acciones como colaboraciones.
- Noticias que estén relacionados con nuestra marca o sector.
- Tutoriales o infografías que muestren las ventajas de utilizar nuestros productos o servicios o cómo utilizarlos.
- Concursos, sorteos o promociones puntuales.
- Responder a dudas frecuentes.
- Mostrar quién está preparando los pedidos, elaborando los productos…
- Y por último, por supuesto, el contenido de venta. Pero no lo hagas con una simple foto, ¡por favor, procura ser más original!, hoy en día las redes sociales nos ofrecen muchísimas alternativas e Instagram se lleva la palma.